El olvido: sobre escenas cotidianas de la infancia. La serie “Combate”

Por Luisa Luchetta

COMBATE I: PESADILLA

En la trinchera barrosa, dos soldados transmiten miedo y horror. Morir joven. Morir sin frío ni calor, solo miedo. Uno muere antes: un proyectil en su frente blanca deja un orificio negro. Por allí asoma el fino lecho rojo que desembocará en la tierra, donde echará sus raíces. Quizá haya visto esta escena en la televisión. Mi mirada de niña la engulló y la guardó en algún lugar desde el que vuelve cada tanto.

imageAlguna noche, algún día de la semana, toda la familia se reunía frente al enorme televisor blanco y negro, a ver la serie preferida de mi abuela, italiana, “Combate”. Los yanquis siempre, o casi, se salvaban, gracias a la enorme superioridad en inteligencia y valentía, que sobresalía ampliamente entre la estupidez alemana. La serie se grabó entre 1962 y 1967, en plena guerra de Vietnam.

MESTRE l: CUANDO SALÍ DE CUBA

Goar Mestre Espinosa nació en Cuba, donde se dedicó a los negocios de la televisión y radiodifusión, entre otros. En política, se opuso a la dictadura de Batista, ya que este impulsaba la regulación de contenidos. Cuando la Revolucifón llegó al poder, Mestre se radicó en Argentina, donde -tiempo después- se nacionalizó.
Aquí integró Proartel (Producciones argentinas de televisión) junto a socios estadounidenses, que adquirieron Cimageanal 13. Fue Mestre quien, como director de programación, le dio al canal un perfil dirigido a la clase media. Al vencer la licencia, el canal resultó luego estatizado, al igual que canal 9 y 11, durante el gobierno de Isabel Martínez de Perón. Pero Mestre no se rindió En los años ’80 se asoció con la familia Macri y fundaron Teleinde (Televisión independiente). También adquirieron, para la producción de telenovelas. los estudios de “Argentina Sono Film”, en la localidad de Martínez.

 

COMBATE ll: EL PELOTÓN

Los roles principales en “Combate” los tenían el Sargento Chip Saunders (Vic Morrow) y el teniente Gil Hanley ( Rick Jason). Este último personaje era un “precusor del teléfono móvil”, ya que siempre (o casi) daba indicaciones desde un lugar seguro, rodeado de parte del pelotón.

Cuenta el anecdotario que, para dar verosimilitud a su aspecto, los actores no podían afeitarse durante varios días, a pesar de la escenografía barata de aquellas épocas.

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El primer capítulo de la serie fue dirigido por Robert Altman, quien años después recibió la Palma de Oro en el Festival de Cannes por la película “M.A.S.H.”, sátira a la guerra de Corea. También y ganó un Oscar honorífico y el Globo de Oro por “Gosford Park”. Altman había participado en la II Guerra Mundial como copiloto en la fuerza aérea, Vic Morrow se había alistado en la Marina de guerra los 17 años y Rick Jason se enroló en el ejército, en 1943. Todos habían aprendido el arte de matar, si es que es un arte. Sin embargo, el primer capítulo de la primera temporada culmina con un alegato por la paz y señala “lo difícil que se le hacía a un soldado norteamericano matar a un enemigo.”

 

COMBATE lll: PEÓN OCHO

Vic Morrow fue un actor y director prolífico. Debutó en la película “Semilla de maldad”, junto a Glenn Ford y Sidney Poitier, allá por el ’55. La serie lo volvió famoso. Su muerte modificó las condiciones de trabajo de los actores en Estados Unidos. Veamos por qué.
Rodaba una escena de «La dimensión desconocida: la película», bajo las órdenes del director John Landis, donde debía atravesar un río con dos niños de seis y siete años en sus brazos, bajo el bombardeo lanzado desde un helicóptero. Los niños fueron contratados de modo ilegal y junto a Morrow, murieron en el set, decapitados y aplastados por el helicóptero que cayó sobre ellos. Ni el director ni el productor (Steven Spielberg) fueron condenados. A cambio, se realizaron reformas laborales para proteger a los menores y regulaciones en seguridad. Al mejor estilo de la hipocresía de lo políticamente correcto.

imageCOMBATE IV: LA PATA LATINOAMERICANA GRINGA

En el primer capítulo, el pelotón comandado por el sargento Saunders toma prisionero a un alemán, rol a cargo de Albert Paulson, actor de origen ecuatoriano, quien trabajó tanto en series como en películas en Hollywood. Según su hermano Juan, Albert emigró a los Estados Unidos a los 16 años e incluso se alistó en el ejército. Tras 69 años fuera de su país natal, regresó solo seis días a Ecuador.

 

MESTRE ll: AÑOS DESPUÉS POR ESTE RÍO

Si bien su anti peronismo le hizo desconfiar de Carlos Saúl Memen, cuando este dio muestras de que sus políticas económicas estaban años luz de las del General, Mestre renueva su entusiasmo emprendedor televisivo. En 1989, junto al grupo Macri se presenta en la licitación de los canales 13 y 11. Macri aporta su enorme respaldo económico y Mestre, su amplia experiencia en el área.
Deciden apuntar su estrategia hacia canal 11 y utilizar las instalaciones de Teleinde en Martínez.
Mestre recibiría el 20% de las acciones, según lo acordado con el grupo. Durante las negociaciones, Mauricio Macri- según relata Pablo Sirvén en su libro » El rey de la TV Goar Mestre y la historia de la televisión» – visita en su casa a Mestre y echa atrás el arreglo. Le comunica que cada uno tiene acciones como dinero aporta. El socio de origen cubano se retira entonces de la licitación, molesto por la falta de palabra de los Macri. ( Es más, recuerda una actitud similar con los Irusta Cornet para entrar en Canal 2). Al enterarse los otros participantes de que Goar Mestre no será de la partida, derrumban las pretensiones del grupo Macri, ya que estos carecen de toda experiencia en el sector. Además denuncian «arreglos» con funcionarios del gobierno de entonces.

 

BATIDO DE MEMORIA Y OLVIDO: EL RECUEimageRDO

Mi abuela Blanca no llegó a ver todos los capítulos de “Combate”, la serie que se convirtió en culto familiar, gracias a su memoria. No entiendo qué veía en esas historias tan inverosímiles, de buenos y malos, en blanco y negro, tan hipócritas. Solo rescato ese olor familiar, indescriptible. El perfil de mis viejos, de mi hermano al mirar la tele de reojo. La habitación oscura, iluminada por los grises nacidos del televisor a lamparitas. Revivo la felicidad que sentía al estar todos juntos. No hay olvido, hay batidos, espuma inconsistente. Y, en el aire, flota, toma diferentes formas y se deshace.

 

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