Deseantes: sobre una notita dejada antes de un secuestro.
Por Lourdes Cabrera
INDEPENDENCIA NEGRA
“9 de julio”: no detalla el año, eterniza el momento. Y, 40 años después, el dato parece recién escrito. Así como el tiempo sin cifra se incluye en una fecha, en Graziella, están incluidas todas las mujeres de América Latina que sufrieron cárcel y torturas incalificables de parte de las dictaduras y del Plan Cóndor. La línea de tiempo que atraviesa la biografía de Grazeilla no tiene final porque su lucha trasciende la adversidad de los golpes del plantón, de la humillación.
Saber no es nada. Graziella supo que saber lo que la esperaba no era nada comparado con no ver más a Luis ni a su familia. La tortura no es un saber y solo agrega padecimiento al cuerpo. Pero, mientras la caligrafía avanza, dimensiona el momento.
ZAFAR SÓLO UNA VEZ
Pando, recostada sobre la ruta 8, es una ciudad industrial del departamento de Canelones, Uruguay. Allí, en el año 1969 y en homenaje al Che, sus instituciones públicas fueron tomadas por el MLN-Tupamaros. Ahí mismo, en la ciudad tomada, Graziella esperaba a su papá, quien la solía llevarla hasta la ciudad de Montevideo, donde ella concurría a la Facultad. En ese momento oyó ruidos en la calle. No era la primera vez que lo imaginaba: la venían a buscar. Los tiempos eran duros. Para colmo, su militancia una vez la había llevado a pintar muros en reclamo por la muerte de Nybia Sabalsagaray, una docente asesinada. Tal vez, por eso la tenían marcada. Pero Graziella se equivocaba. Esa vez no venían por ella, las camionetas pasaron de largo. No transcurrió un día sin que algún vecino, amigo o conocido fuera buscado y desaparecido.
LOS PANAMÁ TEACHERS
El 27 de junio de 1973 se disuelven las Cámaras de diputados y senadores y Uruguay cambia su imagen de país tranquilo y próspero por el terror institucional. No sabés a quién tenés a tu lado, ni quién es tu enemigo. Así y todo, los obreros y estudiantes encabezan la resistencia a la dictadura cívico militar. «En la entrada a las fábricas del turno de las 6 AM comienzan espontáneamente las primeras asambleas obreras, deciden la ocupación de las fábricas y el envío de delegados a otros centros de trabajo. A media mañana ya se encuentran ocupadas fábricas, oficinas, bancos y centros estudiantiles, que se proponen extender la lucha ´hasta que caiga la dictadura´«(1). La Marina, el ejército y la aeronáutica más la policía han sido entrenados por la triste y célebre Escuela de las Américas en Panamá que, desde 1949, cumplió esa perversa “labor docente”. «Al mediodía comienzan las primeras manifestaciones de protesta en la calle. El régimen responde con allanamientos y detenciones. Se extiende la huelga, que ha paralizado todo el transporte de Montevideo”.(1)
La resistencia se endureció. La huelga se extendió a todas las regiones con actividad industrial. La universidad y la Federación de estudiantes universitarios adhieren al reclamo. Las detenciones no se hacen esperar. Por eso, tras quince días, dado el desfavorable equilibrio de fuerzas, se decide levantar la huelga. Por entonces, los detenidos superaban los 20.000. Eso fue en julio. Pasaban los meses y los cuarteles no tenían lugar para albergar tantos detenidos, por eso comenzaron a habilitar a tal efecto hasta estadios de básquet y otros lugares completamente inhóspitos. El primero de estos lugares fue el “Cilindro municipal de básquet”, allí confinaban a docentes, periodistas y trabajadores. Este era un sitio de tránsito, luego eran trasladados. Otro de estos pequeños avernos se apodó “Infierno chico”: se trataba de una casona en Punta Gorda, un barrio elegante de Montevideo. Más lejos, en Punta Rieles (llamado así porque esa zona resultó el límite hasta donde llegó el tranvía en su momento), se estableció la cárcel de mujeres, presas políticas a cargo del Poder Ejecutivo. “La fábrica” o “El 300 Carlos”, un centro clandestino de detención, que luego pasó a oscura fama, porque allí se realizó “la operación zanahoria”. A mediados de 1984, el entonces candidato a presidente Julio María Sanguinetti convocó a un militar con el objetivo de borrar las huellas de los enterramientos. El coronel retirado Gilberto Vázquez dijo: “No quedó nada. Sacamos todo lo que se podía ubicar (en cuanto a restos óseos de detenidos desaparecidos durante la dictadura) y lo que en su momento no encontramos nosotros, no lo encuentra nadie”, reveló Vázquez.(2) Por supuesto, Sanguinetti lo negó y alegó que, si hubo remoción de restos de “personas muertas”, debió suceder durante la Dictadura.
“ME VIENEN A BUSCAR…”
“En la bolsa de su almuerzo iba la vida”, “Guitarra negra”, Alfredo Zitarrosa.
Entre las cortinas abiertas de par en par se cuela el tenue sol de julio. Por allí, los ve: los uniformados se acercan. Ahora sí vienen por ella. Siente las pisadas frente a la puerta. De un empujón la abren. Las armas largas le producen una fuerte impresión. Fuerte y breve. No hay tiempo. Pero, aun así, saca una lapicera de su bolso y comienza a escribir. Piensa que no lo verá más. Por eso, en ese momento, no hay gesto más imprescindible para ella que poderle mostrar a su marido cómo se ha ocupado del almuerzo. Se trata de un deseo tan fuerte de afirmarse a la vida que, aun ante el claro peligro de perderla, la escritura se obstina en algo que puede parecer incluso trivial, como cumplir el rito cotidiano de una comida para el compañero.
ENTRE DOS PATRIAS
Si en fecha patria argentina se la llevaron, en fecha patria uruguaya, la liberaron: fue un 18 de julio de 1973. Al poco tiempo, lo liberan a Luis. En este sentido, se trata de una historia con “suerte”. Luis falleció en el 1999. Y Graziella aún sigue viva.
El tiempo pasó. Mucho tiempo pasó. Llegaron las redes sociales. Y entonces el deseo de rescatar esta historia, esta metáfora del horror, quedó en manos de un hijo de ambos, quien posteó una foto de la notita. La imagen se viralizó en facebook. Un reguero de deseos. Para que nunca falte quien se ocupe de alimentar la lucha, la resistencia. A dónde habremos llegado que hay que defender con la escritura el derecho a prepararle a un almuerzo al ser querido.
(1)27.06.2014 www.presidencia.guv.uy
(2) Dossier la Red 21: 40 años del golpe